Convierte a tus suscriptores en una comunidad

Categoría: Consejos Email Marketing

Una newsletter es como una carta: tú la envías y alguien la recibe. Podría considerarse un monólogo que haces para impresionar a las personas que te escuchan. Ellas no se conocen entre sí, igual que los clientes en la tienda tampoco saben quién tienen en el probador de al lado o detrás en la cola. Es todo bastante solitario. Pero puedes cambiar esta situación convirtiendo a tus suscriptores en una comunidad.

Si tienes un remitente con nombre y apellidos, ya tienes algo ganado porque la primera tarea es asegurarte de que les estás escuchando. Tú vas a actuar como el gestor de la comunidad así que tendrás que atender a sus mensajes (no relacionados con sus compras) y tramitarlo para que lleguen en la mejor forma posible al resto de suscriptores.

Para que te sea más fácil y no se te sature tu correo electrónico corporativo, puedes crear un formulario desde donde recoger sus mensajes. Desde ahí podrás pedirles la información que necesitas para darles voz dentro de tu newsletter. Plantéalo como una charla o entrevista que pueda servir, no solo para tu empresa, también para otros suscriptores. Algunas ideas para que te animes a probar:

• ¿Qué artículo del blog o contenido de nuestras redes te ha gustado más?
• ¿En qué te ha ayudado nuestro producto en tu día a día?
• ¿Qué truco podrías contarnos para inspirar a otras personas?
• ¿Qué funcionalidad te gustaría que incorporásemos en el futuro?
• ¿Cómo definirías en una palabra o dos lo que somos para ti?

Estas respuestas deben ir acompañadas de un pequeño perfil personal (nombre, ciudad, profesión, desde cuando es cliente…) y también de sus redes sociales para darle un enfoque personal, no solo orientado a tu producto o servicio. Por eso también puedes recurrir a algo totalmente alejado de tu sector y preguntar por su lado más humano como qué libro están leyendo, la última película que han visto en el cine o su serie favorita. 

Para cumplir con el objetivo de que los suscriptores se relacionen contigo tanto como entre ellos, puedes pedirles que le hagan una pregunta a la próxima persona que vayas a entrevistar, creando una cadena entre ellos. Puedes motivarles para que participen ofreciéndoles algún descuento o un adelanto de tu próximo producto. Si te animas, puedes organizarles una reunión, invitarles a que visiten tus oficinas o dejarles participar en una fiesta con los trabajadores. Así sentirán que forman parte de un club realmente exclusivo.

Para dar a conocer sus respuestas, crea una sección en tu newsletter dedicada a tus clientes. Según el diseño de tu plantilla corporativa, puedes añadir un bloque en el que aparezca una frase destacada de lo que te han contado. El enlace puede ir al blog o a las redes sociales, según cuál quieras potenciar más. Poco a poco irás recopilando testimonios que también encajarán bien en tu web, más aún si allí también tienes un foro de intercambio de dudas entre tus clientes.

Ten en cuenta que la comunidad de suscriptores no ha de coincidir con la que ya tengas en tus redes ni los usuarios registrados de tu web. Son complementarias y puedes ofrecerles beneficios diferentes a cada una de ellas. Por ejemplo, enviar un resumen del “suscriptor del mes” en el mensaje de bienvenida de tu newsletter es una acción más, no solo has de compartirlo en tus redes.

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